Una vez que el bateador ha conectado con la pelota, debe de correr por orden en las bases. Es tarea de los defensores y de los jugadores, atrapar la pelota y lanzarla rápidamente a la base más cercana a la cual se esté dirigiendo su oponente, con fin de dejarlo fuera (out). Cada vez que se cruza el punto de bateo, se anota un punto.
Los partidos constan de nueve entradas, con tres eliminaciones por entrada. Gana el equipo con mayor puntuación al final las nueve entradas.